La frase que encabeza este blog fue extraída de una obra de John Milton; El paraíso perdido. La escogí porque me pareció muy interesante y acertada, ya que habla de la independencia de la mente a la hora de traducir situaciones, pudiendo darles un sentido completamente enrevesado y muy distinto del significado real.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Gata Cattana

ANDREA